Los bancos centrales planean unir fuerzas con el sector privado para el Proyecto Agorá, explorando cómo la tokenización del dinero mayorista del banco central y los depósitos de los bancos comerciales en plataformas programables puede mejorar el sistema monetario.

Partiendo de un concepto de libro mayor unificado propuesto por el BPI el año pasado, el proyecto investigará cómo los depósitos tokenizados de los bancos comerciales pueden integrarse perfectamente con el dinero tokenizado mayorista del banco central en una plataforma financiera central programable público-privada.

Esto, dice el BPI, podría mejorar el funcionamiento del sistema monetario y proporcionar nuevas soluciones utilizando contratos inteligentes y programabilidad, manteniendo al mismo tiempo su estructura de dos niveles.

El objetivo principal es aumentar la velocidad y la integridad de los pagos internacionales, al tiempo que se reducen los costos.

Participan el Banco de Francia, el Banco de Japón, el Banco de Corea, el Banco de México, el Banco Nacional Suizo, el Banco de Inglaterra y el Banco de la Reserva Federal de Nueva York. Trabajarán con “un gran grupo de empresas financieras privadas” convocadas por el Instituto de Finanzas Internacionales.

Cecilia Skingsley, directora del BIS Innovation Hub, dijo: “Hoy en día, numerosos sistemas de pago, libros contables y registros de datos requieren otros sistemas complejos para integrarlos. En el Proyecto Agorá, queremos explorar una nueva infraestructura de pago común que podría reunir todos estos elementos y hacer que el sistema funcione de manera más eficiente en conjunto en una infraestructura financiera central digital.

"No sólo probaremos la tecnología, sino que la probaremos dentro de las condiciones operativas, regulatorias y legales específicas de las monedas participantes, junto con las compañías financieras que operan en ellas".