Los microcontroladores han sido un componente clave en la automoción durante años, comenzando con dispositivos de un solo núcleo con memoria limitada en el chip para funciones muy básicas y evolucionando hacia sistemas multinúcleo con más memoria para tareas más complejas. Pero a medida que los vehículos se vuelven cada vez más automatizados, los microcontroladores están cambiando significativamente, al igual que la percepción de cómo utilizarlos. Estos nuevos dispositivos deben funcionar dentro de estrictas limitaciones de energía, temperaturas ambiente extremas y deben tener suficiente potencia de cálculo, memoria y rendimiento para tomar decisiones rápidas. Kajetan Nürnberger, ingeniero de conceptos de software de Infineon, y Guy Ben-Haim, gerente senior de productos de Synopsys, hablan sobre el cambio de énfasis del uso de chips como diferenciador a un elemento poderoso pero más estandarizado que puede usarse para el desarrollo de software personalizado, lo que permite la automatización. Los OEM podrán llegar al mercado más rápido y aprovechar las economías de escala con la creación temprana de prototipos de software.

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