Logotipo de Zephyrnet

El hachís explicado: la tradición se encuentra con la ciencia | Concentrados de Cannabis

Fecha:

Riesgos potenciales y efectos secundarios

El consumo de hachís presenta riesgos similares a los del cannabis no concentrado pero intensificados. Aunque no se han documentado muertes por el consumo de hachís, es fundamental consumirlo con moderación y precaución para evitar efectos secundarios no deseados. Los posibles efectos secundarios incluyen confusión, paranoia, aumento del apetito, alteración del control motor, cambios en el ritmo cardíaco, ojos rojos, sequedad de boca, entre otros. Consultar con un médico antes del consumo recreativo de hachís es esencial para garantizar una experiencia segura.

Preparación:

A lo largo del tiempo se han empleado diferentes métodos para la preparación del hachís, desde prácticas ancestrales como frotar flores frescas o tamizar en seco hasta métodos más modernos como la separación de hielo y agua, hielo seco, electricidad estática, calor y presión, y vibraciones acústicas, con el objetivo de para obtener un producto más puro.

Un estudio realizado por Jean-Jaques Filippi, Mariel Marchini, Céline Charvoz, Laurence Dujourdy y Nicolas Baldovini en 2014 vinculó el sabor distintivo del hachís con una alteración del mirceno durante su proceso de fabricación.

Legalidad y calidad:

La legalidad del cannabis ha sido objeto de debate y controversia durante décadas en todo el mundo. Casi todos los países cuentan con leyes relacionadas con su cultivo, posesión, venta y consumo. Si bien los productos no psicoactivos, como la fibra y las semillas, son legales en muchos lugares, los que tienen un alto contenido de THC se consideran sustancias controladas en la mayoría de los países, con excepciones para uso medicinal. Se han presentado argumentos a favor de cambios en su regulación debido al fracaso percibido de las políticas prohibicionistas y de aplicación de la ley.

La calidad del hachís puede variar considerablemente y puede determinarse mediante varios indicadores. El olfato es uno de los principales, ya que el hachís de alta calidad tiene un aroma fragante y aromático, mientras que el hachís de baja calidad puede tener un olor rancio o a moho. La consistencia pegajosa puede indicar la adición de aceites para aumentar el peso del producto, mientras que un color interior más verde puede sugerir un mayor contenido de material vegetal.

El hachís, también conocido como hachís o chocolate por su característico color marrón, produce efectos psicotrópicos similares a los de la marihuana pero con impactos cognitivos adicionales. Los efectos pueden ser tanto a corto como a largo plazo e incluyen distorsión sensorial, mala coordinación, dificultad para respirar, ansiedad, sequedad de boca e irritación de los ojos. El consumo excesivo puede provocar intoxicación, con síntomas como ataques de pánico, vómitos y taquicardia. El consumo prolongado puede tener efectos nocivos y peligrosos, como pérdida de memoria, concentración y daño pulmonar.

punto_img

Información más reciente

punto_img